sábado, 14 de mayo de 2011

Un buen libro de los magos.

Las inteligencias disponibles en los albores del siglo XX se hallan enfrascadas en las especulaciones sobre el éter. En 1898, se produce la catástrofe: el experimento de Michelson y Henri Poincaré, matemático genial, sentía gravitar sobre sí el enorme peso de ese siglo XIX que había sido carcelero y verdugo de lo fantástico. Él habría descubierto la relatividad si se hubiese atrevido. Pero no se atrevió. "La valeur de la Science", "La Science et l'Hypothése", son obras desesperadas y de dimisión. Para él, la hipótesis científica no es nunca verdadera; sólo puede ser útil. Y es como una fonda española: sólo se encuentra en ella lo que uno lleva. Según Poincaré, si el Universo se contrajese un millón de veces, y nosotros con él, nadie advertiría nada. Especulaciones inútiles, por ajenas a toda realidad sensible. Su argumento fue citado hasta principios de nuestro siglo como modelo de profundidad. Hasta el día en que un experto ingeniero hizo observar que, por lo menos, se daría cuenta el tocinero, pues todos sus jamones se vendrían al suelo. El peso de un jamón es proporcional a su volumen, pero la fuerza de un hilo no es proporcional a su sección. ¡Que se contraiga el Universo un millón de veces, y todos los jamones irán por los suelos! ¡Pobre, viejo y querido Poincaré! Este maestro del pensamiento había escrito: «Basta el sentido común para decirnos que la destrucción de una ciudad por la desintegración de medio kilo de metal es una imposibilidad evidente.»

Louis Pauwels, Jacques Bergier (Le retour des magiciens (El retorno de los magos))



He hallado una equivocación en este texto. Como no soy un experto en física ni en matemáticas ni en filosofía ni en nada -y tampoco había leído el libro de Pauwels y Bergier; pero Internet permite el tener acceso gratuitamente a libros y a música que de otra forma habría que haber comprado (no es posible comprarlo todo) o que te hubieran prestado (no es posible que te presten todo) o que los hubieras leído (no es posible leer todo de forma completa) , he podido leer en lectura rápida este fragmento aquí citado- no estoy nada seguro que el equivocado no fuera yo, que tampoco además soy mago.

La lectura de los libros sobre filosofía de la ciencia del matemático Poincaré es de interés y precisamente contrarios al cientismo reduccionista y filo-totalitario imperante, por lo que me extraña que Pauwels (o Bergier) se meta (o parezca meterse) con él. Pienso que Poincaré, al escribir «Basta el sentido común para decirnos que la destrucción de una ciudad por la desintegración de medio kilo de metal es una imposibilidad evidente.», estaba relatando, sin más, lo que el hombre de la calle pensaba . No lo que él pensaba.

Si el universo se redujera en volumen 1.000.000 de veces proporcionalmente en las 3 dimensiones, debiera ser 100 veces más pequeño en longitud, 100 en anchura y 100 en altura, él y todos los objetos en él. Una cuerda gruesa de 1 metro de largo y de 1 centímetro cuadrado de sección se reduciría a una de 1 centímetro de largo y 0,01 milímetro cuadrado de sección. La fuerza que puede soportar una cuerda es más o menos proporcional a su sección por lo que esta cuerda reducida es 10.000 (10.000=100*100, ya que una sección circular es proporcional al cuadrado de su radio) veces más débil que la original, pero el jamón (que sea de Jabugo que son mejor que los de Bayonne que también son estupendos) pesaría 1.000.000 de veces menos y por tanto no sólo la cuerda no se rompería si no que se podrían colgar 1.000.000 / 10.000 = 100 jamones de cada una.

Si fuera al contrario, una expansión del universo 10^6 veces, entonces la cuerda sí se rompería al pesar el jamón 100 veces más que el aumento de fortaleza de la cuerda.

Y ya que estamos en lo literario, un Gargantúa 1.000 (10^3) veces mayor que nosotros, de 80 toneladas de peso, 18 metros de altura y 3 metros de anchura tendría que soportar por lo dicho anteriormente una fuerza sobre los huesos de las piernas 10 veces superior , proporciones guardadas, a la que soportamos nosotros lo cual es probablemente imposible, aunque tampoco soy biólogo ni médico y Rabelais nos estaba por tanto engañando, haciendo literatura, como se ha pretendido demostrar con brevedad pero sin falta de rigor. Un Gargántua 10.000 veces mayor que nosotros, de 800 toneladas de peso, de 39 metros de altura y 6,5 metros de anchura, sería probablemente un límite superior infranqueable.

PS1: No he pretendido meterme para nada con las tesis de Pauwels, apenas quiero remarcar un exceso de literatura, el "literatismo" , ese culturalismo tan frecuente en los franceses,no sólo en Pauwels, tan institucionalizado, no tan creativo, al contrario de lo que se cree;


y la equivocación de los magos  que es  más una equivocación literaria (o disléxica) que científica, al confundir reducción con expansión del universo y sus efectos sobre las cuerdas que sustentan los jamones.

PS2: Me ha costado unas 3 horas de  reflexión deducir y escribir lo aquí plasmado y aún tengo alguna duda. Estoy muy lejos de la gente que puede leer un libro de 900 páginas antes de dormirse, y asimilarlas, según dicen, sin esfuerzo. Yo ,10 páginas de lectura ya me cansan y eso desde joven. ¡Para deducir algo tan sencillo en el fondo, cuanto esfuerzo necesito yo!

Nota: Me gusta ese libro de Pauwels y Bergier

2 comentarios:

Admin Blog 5011 dijo...

me he hecho un lío con la expansión y la reducciónn de los jamones y los hilos que los sustentan,... con lo que sí estoy de acuerdo es con lo del jamón, -preferentemente de Jabugo por favor-...y también me gustan las hipótesis porque nos hacen soñar

más saludos

pilar

Robín dijo...

Las hipótesis son bellas como las mujeres y como con las últimas hay que tratarlas con fineza. Pero bien elaborado, después de todo, el libro de Pauwels y Bergier. Plantea cuestiones de alto vuelo aunque difíciles de ser aprehendidas en pocos minutos de simple lectura.