Borges tiene un cuento muy breve no excesivamente logrado en comparación con otros (1) en que un Jorge Luis joven visita a otro Borges anciano en alguna habitación; se supone que el mayor no lo sabe, aunque puede que recuerde que de despreocupado, se visitó viejo. Diferentes tiempos superpuestos en un mismo espacio; el joven ha utilizado una de las máquinas del tiempo de las que nos habló Wells. En la historia no recuerdo que ocurriera nada, los personajes no interfieren. Imaginemos ahora a un escritor en ciernes, a ese joven que quiere ser feliz al que el anciano le confiesa que no pudo serlo, que decidido a vivir su vida sin esfuerzo, compra sus libros completos en el futuro, los transporta al pasado, copia y presenta a sus editores que los publican mientras él se dora al Sol y a las mujeres de Brasil . No es que ese Borges, al fin feliz, contradiga a otro Borges que no lo fue, como él mismo reconoció (2). Es que ¿quién escribió entonces los libros de Borges?
(1): Lo he leído al azar internetesco; espero que no sea apócrifo.
(2): Se puede dudar de que la felicidad de Sol y Nada sea superior al orgullo de haber leído lo que casi se pudo escribir.
Nota: Este breve texto ha pretendido demostrar la unicidad del personaje que nos interesa, hacer valer que, como las madres, escritores sólo hay unos.
4 comentarios:
mejor preguntarse qué en lugar de quién
qué cosas tan mágicas no escribió nunca
(sea cual sea el tipo de línea que hay entre A y B, la cosa es enamorarse, sobre todo si la distancia es larga... sobre todo eso)
De tí me estoy enamorando ya, Kristel. Slowly but steadily the tide rises.
Though slowly and steadily, as well, it unrises also.
No; era un cuento sin casi ninguna referencia literaria externa, bastante soso, muy corto, que encontré en Internet. Es más que probable que fuera apócrifo, porque tenía poca calidad, aunque no estoy seguro.Porque Borges a veces se pasaba de inmovilista literario.
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